Al presentar una demanda por lesiones personales, uno de los factores que pueden complicar el proceso es la presencia de enfermedades preexistentes. Las enfermedades preexistentes se refieren a lesiones o problemas de salud que existían antes del incidente en cuestión. Aunque tener una enfermedad preexistente no le impide necesariamente obtener una indemnización por daños y perjuicios, puede afectar a la forma en que se tramita su caso. Entender cómo las condiciones preexistentes afectan a las demandas por lesiones personales es crucial para maximizar sus posibilidades de recibir una compensación justa.
¿Qué son las enfermedades preexistentes?
Las enfermedades preexistentes son los problemas de salud o lesiones que existían antes del accidente o lesión. Estos pueden ir desde enfermedades crónicas como la artritis o dolor de espalda a los accidentes anteriores, cirugías o lesiones. Cuando estas condiciones se ven agravadas por un nuevo accidente, es importante entender cómo pueden influir en el resultado de su demanda por lesiones personales.
Ejemplos de enfermedades preexistentes
- Dolor crónico: Dolor de espalda, cuello o articulaciones anterior al accidente.
- Cirugías previas: Lesiones que se trataron con cirugía o intervención médica antes del accidente.
- Enfermedades autoinmunes: Afecciones como la artritis reumatoide que pueden agravarse por traumatismos físicos.
- Accidentes o lesiones anteriores: Cualquier lesión anterior que pueda haberse curado o haber dejado secuelas, como una lesión por accidente de tráfico anterior.
Cómo influyen las enfermedades preexistentes en las demandas por lesiones personales
Aunque las enfermedades preexistentes no le impiden presentar una demanda por lesiones personales, pueden afectar a varios aspectos de su caso. He aquí cómo pueden afectar el proceso de reclamación:
1. Agravación de la enfermedad preexistente
Si el accidente agrava su dolencia preexistente, aún puede tener derecho a indemnización. Sin embargo, puede ser difícil demostrar el alcance del agravamiento. Las pruebas médicas desempeñarán un papel crucial a la hora de establecer que el accidente afectó directamente a su dolencia o la empeoró. La clave está en demostrar que el accidente provocó un aumento de la gravedad de la lesión o aceleró la progresión de su dolencia preexistente.
2. Tácticas de las compañías de seguros
Las compañías de seguros pueden intentar utilizar su enfermedad preexistente en su contra. Podrían argumentar que sus síntomas o lesiones están relacionados con su enfermedad y no con el accidente en sí. Por eso es fundamental contar con historiales médicos completos y con el testimonio de expertos. Un abogado experto puede contrarrestar estas tácticas proporcionando pruebas sólidas de que el accidente empeoró su condición.
3. Causalidad y carga de la prueba
En los casos de lesiones personales que implican afecciones preexistentes, probar la causalidad se hace más complicado. Su abogado tendrá que demostrar que el accidente causó nuevas lesiones o agravó otras preexistentes. El testimonio de expertos médicos puede ayudar a aclarar cómo contribuyó el accidente a sus síntomas o afección.
4. Daños por enfermedades preexistentes
Cuando se agrava una dolencia preexistente, aún puede tener derecho a una indemnización tanto por la nueva lesión como por el agravamiento de la dolencia existente. Estos daños pueden incluir facturas médicas, salarios perdidos, dolor y sufrimiento, y futuros gastos médicos. Sin embargo, es posible que tenga que aportar documentación clara y dictámenes médicos para diferenciar entre la lesión causada por el accidente y los efectos de la enfermedad preexistente.
La regla de la cáscara de huevo del demandante
En la ley de lesiones personales, la regla del "demandante cáscara de huevo" es un concepto que hace responsable al demandado de todas las lesiones de un demandante, incluso si el demandante tenía condiciones preexistentes que lo hacían más vulnerable al daño. En otras palabras, si su condición preexistente le hizo más susceptible a las lesiones, el demandado sigue siendo responsable de la totalidad de los daños causados por el accidente.
Ejemplo de la regla del demandante cáscara de huevo
Si alguien con antecedentes de dolor de espalda se ve implicado en un accidente de tráfico y el accidente empeora su dolencia de espalda, la parte culpable puede ser considerada responsable del alcance total de la lesión, aunque la espalda del demandante ya fuera vulnerable.
Cómo Dermer Law puede ayudarle a navegar condiciones pre-existentes en su reclamo
En Dermer Law, entendemos las complejidades de las demandas por lesiones personales que involucran condiciones preexistentes. Nuestro experimentado equipo de abogados trabajará con profesionales médicos para proporcionar evidencia de que su condición preexistente fue agravada por el accidente y que usted merece una compensación justa.
¿Por qué elegir Dermer Law?
- Abogados con experiencia: Con un equipo dirigido por Jay Dermer y Maxwell Shrem, tenemos la experiencia para manejar casos complejos de lesiones personales, incluyendo aquellos que involucran condiciones preexistentes.
- Pruebas médicas sólidas: Colaboramos con profesionales de la medicina para asegurarnos de que sus enfermedades preexistentes y su agravamiento queden minuciosamente documentados.
- Enfoque centrado en el cliente: Tratamos a nuestros clientes como familia y luchamos para obtener la indemnización que merecen, independientemente de los problemas de salud preexistentes.
No deje que las enfermedades preexistentes le impidan buscar justicia
Si tiene una enfermedad preexistente y ha sufrido lesiones en un accidente, sigue teniendo derecho a reclamar una indemnización. No deje que las compañías de seguros se aprovechen de su historial médico. Póngase en contacto con Dermer Law hoy para una consulta gratuita, y permítanos ayudarle a navegar por el proceso de reclamaciones y luchar por la compensación que se merece.